Este año el paso postnupcial de limícolas por la marjal ha sido pobre,
pobrísimo, y apenas he podido disfrutarlo.
Sabiendo que quizás ya sea un poco tarde me acerco a un arrozal
encharcado con la esperanza de pillar algo de este paso migratorio.
Pues tras 3-4 horas de espera, lo único que ha aparecido son un par de
cigüeñuelas, 1 combatiente, algún zarapitin y un grupito de tres archibebes
claros. Además se han mantenido a mucha distancia y en actitud muy desconfiada,
no en vano algún lagunero pasaba por aquí de vez en cuando.
Al final se han acabado marchando todas las aves y las
únicas que se han acercado mínimamente son los archibebes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario